Cada año, miles de rumanas contraen sordomudismo temporal. Una extraña dolencia que hace que quien la sufra sea incapaz de hablar con los turistas y tengan que comunicarse con ellos por gestos. Los enfermos, son capaces de hablar entre ellos, y hasta pueden hacer bromas o estar de cachondeo. Pero al ver un turista, pierden el habla y ponen cara de pena. En su carpetita, tienen una hoja con unas columnas Excel donde puedes leer cosas interesantísimas muy recomendables acerca de su coyuntura.
¿Cómo puedes ayudar?
Puedes ayudar firmando en esa hoja. Puedes darles dinero para investigar tratamientos experimentales o simplemente charlas con ellas mientras ofreces tu mochila a sus compañeras como muestra de solidaridad.
¡Recuerda!
Las sordomudas transitorias rumanas no tienen la culpa de su enfermedad. Habla con ellas, escúchales, ayúdales.
1 comentario:
Word. Se han puesto las botas esta semana.
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