08 julio 2008

La noche de los nenonenos vivientes

La juventud se está tomando las nuevas ordenanzas municipales anti botellón de muy mala manera. Allá va un corta y pega de una impactante noticia de La Voz de Galicia:

Un policía local dispara al suelo tras la agresión a tres agentes que vigilaban el botellón en A Coruña

"Cuatro heridos, dos detenidos y un tiro al suelo es el resultado de la refriega que en la madrugada del pasado viernes al sábado se registró en la céntrica calle coruñesa de la Franja, a pocos metros del palacio municipal de María Pita.
Al filo de las 3.30 horas, un agente de la Policía Local, que salía del edificio municipal de la Franja tras realizar diversas mediciones de contaminación acústica en la zona, fue rodeado por un grupo de jóvenes que empezaron a increparlo y golpearlo.
Una patrulla del 092 que en esos momentos pasaba por la zona dentro de su ronda de control de los puntos de concentración del botellón acudió de inmediato en su ayuda, algo que no hizo más que aumentar la intensidad de los forcejeos.
En el intercambio de golpes, uno de los chicos intentó darse a la fuga para buscar ayuda y uno de los agentes salió en su persecución. Mientras, sus dos compañeros, acosados por más jóvenes, siguieron recibiendo toda clase de golpes.
Uno de los policías, al sentirse acosado y amenazado, según informaron fuentes municipales, desenfundó su pistola reglamentaria y disparó un tiro al suelo para intentar desperdigar al grupo agresor y retomar el control de la situación ante el incremento de las agresiones."

Si apalean policías por intentar medir la contaminación acústica, ¿qué harán las liebres coruñesas cuando vean cómo el coche les lleva la grúa?. ¿Le cortarán el cuello a la autoridad cuando éstos les recriminen por mear en una pared?. Aquí tenéis la intro de la nueva película de Romero.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaaaaale, voy a hacer de abuelo cebolleta, pero si no lo digo reviento.

Cuando nosotros hacíamos botellón era porque NO TENIAMOS UN PAVO. Estos hijosdeputa llevan encima más pasta en ropa que yo en mi armario y beben en la calle como podían estar bebiendo en su puta casa.

Y encima si no les dejan montar jarana se crecen porque coartan su libertad. Si por casualidad dan con algún pitufo de los que me han tocado en alguna "pequeña discrepancia" por motivos generalmente "circulatorios" o de estacionamiento, ahora estaríamos hablando de una verdadera carnicería.

Niñatos.

Anónimo dijo...

...plas, plas, plas!!!!

mc, para cuándo tu columna en La Opinión?

Hematocrítico dijo...

Tu propio blog YA

Anónimo dijo...

Los putos niñatos son una PLAGA.