27 marzo 2008

¡Ahora sí! Este cura NO es mi padre

Es la hora de acabar con la sonrisilla de los vecinos de la aldea con el primer kit de paternidad casero que se pone a la venta. Acude a la cuchilla de afeitar que papá tiró hoy a la basura y voilá. Que la conversación de la cena esa noche será entretenida, está garantizado.

3 comentarios:

diminuta dijo...

percibo una incipiente línea temática en los avatares de la paternidad...
¡quiero el cepillo de rouco!

Anónimo dijo...

No puedo llegar a imaginar la interminable lista de efectos secundarios y contraindicaciones del citado producto. De todos modos creo que batirá record de ventas. Habia que hacerse con la pantente del producto porque creo que esta es una de esas genialidades que te hacen millonario de la noche a la mañana. Que pena no habersenos ocurrido antes!!

Hematocrítico dijo...

Caramba, diminuta... ¿me está usted diciendo que en mi historia de la orgía de Lancashire vio usted un relato sobre la paternidad?