Mi opinión de A Coruña

A Coruña vuelve a acercarse al Springfield que lleva dentro con la inauguración este mes de nuestra nueva paranoia : El funicular de San Pedro. La arielita, vamos. Las razones de alguien para querer subir a este monte se me escapan. Pensado como gran zona verde de la ciudad, en agosto hay que visitarlo con piedras en los bolsillos para no salir volando. Calculo que en diciembre hay que soldarse las plantas de los pies a una roca. Por otro lado, el funicular está a ocho o nueve pinos de cualquier metro cuadrado de civilización - contando como civilización Los Rosales -, con lo que hay que ir en coche. Aparcar a 100 metros de tu destino para hacer ese último tramo en una arielita me parece un concepto demasiado coruñés incluso para Coruña. Pero gastarse una superpasta en un concepto peregrino que a nadie le gusta y nadie piensa usar, y efectivamente nadie usa, sería un despropósito y las mentes pensantes del Ayuntamiento jamás harían eso en nuestra ciudad con nuestro dinero ¿verdad?.¡Con lo bonito que es nuestro obelisco del Millenium y el tranvía y lo útiles y visitados que son!.
Por otro lado hoy se prevee el retorno de la überbandera, el macrobanderón de España que ondea en el rompeolas del Orzán cuando no está ocupado partiéndose y despeñándose que suele ser cuando sopla algo de viento. Ahora volverá con una primita igualmente gigantesca de Galicia. Una idea tan políticamente correcta pero igual de chorras sólo se le pudo ocurrir a nuestro alcalde el increíble hombre Paco, miniPaco, el hombre de Paco, como le queráis llamar.
Por cierto, hay alerta de temporal. Sería demasiado bonito...
Cito a Lyle Lanley, el tío que vendió a Springfield el monorail en lo que considero que debería ser el lema de nuestra ciudad.
" Una ciudad con dinero es como una mula con un yoyó. Nadie sabe de dónde lo sacó y ni idea de cómo utilizarlo"